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Colores fríos en decoración – combinaciones y + de 30 imágenes

Los colores fríos en la decoración, dan la apariencia de retroceso, es decir, parece que se encuentran más lejos de lo que están, por esta razón funcionan muy bien en habitaciones pequeñas, ya que le dan al espacio la sensación de ser más amplio de lo que realmente es; las cosas se «alejan». Estos tonos,  por ejemplo, se pueden utilizar para hacer que un techo bajo parezca más alto de lo que es.

La emoción humana detecta los efectos de los tonos fríos como una sensación de alivio, frescura y tranquilidad. Entre estos colores se encuentran el verde mar, violeta, azul, celeste y cian, entre otros.

Colores fríos

Te mostramos algunas fotos de habitaciones decoradas en combinaciones de tonalidades frías pare que te sirvan de inspiración.

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Combinar los colores fríos con blanco

Combinados con el color blanco, se logra un espacio sumamente luminoso. Aquí se ha utilizado un color celeste pastel, y se ha combinado con una alfombra blanca. Sin embargo, se ha dado un toque de color amarillo (color cálido), en un sillón. Además el azul y amarillo son colores complementarios, esto es, opuestos en el círculo cromático, logrando así un equilibrio.

Combinarlos con negro, gris o neutros

Añadir detalles en color negro o gris como el marco de un cuadro, una lámpara o un mueble oscuro, logra un aspecto muy elegante. También es una excelente opción combinarlos con neutros como marrones o beiges.

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Diferentes tonos del mismo color

Este también es otro truco de decoración. Se trata de utilizar diferentes tonos del mismo color, por ejemplo, como vemos en la imagen inferior, de color verde. Esto se llaman decoración monocromática. Se ha utilizado otro color frío para los detalles: al azul. Y pequeños detalles de amarillo, que por ser un color cálido añade un toque de interés.

Consejos para decorar con un esquema de color frío

La mitad de la rueda de color que se compone de verdes, púrpuras o violetas y azules, junto con varias otras combinaciones de estos colores, se conocen típicamente como las tonalidades frías. Estos colores se utilizan para calmar el ritmo respiratorio, relajar los músculos, disminuir la presión arterial y la temperatura corporal, lo que hace que uno se sienta más fresco y relajado. Cuanto más fuerte es el color, más intenso es este efecto de «enfriamiento».

Los colores fríos que recuerdan el agua y el cielo, por lo general tienen la capacidad de calmar y suavizar, por lo que funcionan muy bien en las habitaciones y otras áreas en las que a uno le gustaría relajarse.

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Los colores fríos a menudo parecen como si se alejaran en un espacio y pueden hacer que una habitación pequeña parezca más grande. De la misma manera, pueden hacer que una habitación grande parezca fría y poco acogedora. Grandes cantidades de colores fríos a menudo funcionan mejor en habitaciones con mucha luz cálida y natural.

Si la combinación de colores se se basa fuertemente en grandes cantidades de colores fríos, intenta equilibrar la paleta de colores con uno o dos colores cálidos. Lo mejor es elegir los colores en los extremos opuestos de la rueda de color. Por ejemplo, el balance de un profundo color púrpura fresco sería un color amarillento o anaranjado caliente.

Los colores fríos a menudo funcionan bien en una casa de estilo contemporáneo, pero para evitar que el espacio sea demasiado formal, trata de mezclar con colores más cálidos como detalles decorativos.

A pesar de que todos queremos sentirnos relajados en nuestros hogares, una paleta de colores fríos dominante no puede funcionar bien si tienes una personalidad muy vibrante. Si tu personalidad es así, trata de incorporar colores fríos en detalles de decoración e incorpora un tono más cálido y enérgico como color dominante.

Blancos, negros, grises y otros neutrales pueden funcionar bien en un esquema de color fresco, y dependiendo de los matices del color, estos colores neutros pueden parecer ya sea calientes o fríos.

Loanah Avero